El nuevo puente de Moesa se enmarca dentro del proyecto relativo a la nueva circunvalación de Roveredo y la demolición del trazado existente de la autovía N13. El edificio, ubicado en el costado del puente existente de la carretera, fue demolido, esto permite el cruce del río Moesa y la reconstrucción del núcleo de la ciudad. Se trata de un puente de hormigón armado pretensado longitudinal y transversalmente, y está dividido en 3 vanos de 28 m, 34 m y 28 m de longitud. Tiene una sección maciza constante con una altura de 1,35 m y estantes laterales con un voladizo de 3,35 m. Los estribos se diseñaron perpendiculares al eje del edificio y sin juntas de dilatación, favoreciendo el impacto sonoro y el mantenimiento del edificio. Los pilotes de hormigón armado, de sección circular de 1,10 m de diámetro constante en toda la altura, se cubren con planchas de acero inoxidable o con piedra, descansan sobre losas de 1,50 m de espesor y se cimentan sobre pilotes perforados.